Vigo360

La parroquia de Cabral siempre ha tenido un territorio más reducido de lo que mucha gente cree, algunos piensan que más allá de Martínez Garrido es Cabral, la mayoría piensan que el entorno de la fábrica de Álvarez es Cabral.

De hecho, cuando el Concello, allá por 1987, puso carteles para señalizar los límites de las parroquias, el que separaba Lavadores de Cabral estaba al principio de la fábrica de Álvarez, incluyendo toda la fábrica. No es cierto, el límite de Cabral con Lavadores se encuentra en la Rúa de San Caetano, la Rúa de Manuel Álvarez y la Rúa da Medoña, entre esas calles está el límite entre ambas parroquias. Si bien es cierto que antes de la construcción de Álvarez, existían tierras dentro del perímetro de la fábrica que eran de Cabral. De hecho, el propio barrio de O Sello tiene una parte en Lavadores, alrededor de la Subida ó Sello.

Por todo ello, al pasar Álvarez, nos encontramos en Cabral, una parroquia que, a diferencia del resto de parroquias rurales, cuenta con un núcleo urbano bastante definido. Especialmente, tras la aprobación del Plan General de 1993, que posibilitó la construcción de edificios en esta zona, y de hecho, llegaron unos cuantos.

Todo ello forma una zona central con todo tipo de comercios, como si un pueblo aparte de Vigo se tratara. Incluso tiene un mercado de abastos, que en la actualidad no tiene casi actividad, y que antaño se encontraba en un bajo comercial en un callejón de la Avenida de Ramón Nieto. Tras las quejas de los placeros por la falta de espacio, en 1995 se construyó el mercado actual, compartido con un centro de formación perteneciente a la Fundación Galega do Metal.

Uno de los elementos que forjó a este barrio fue el tranvía, que, después de la Avenida de Ramón Nieto, torcía por la actual Rúa da Vía y se dirigía hacia Peinador por unas vías que, tras el fin del servicio, quedaron abandonadas durante más de 20 años, e incluso hubo quien aprovechó para ampliar su jardín particular. Por ello, y sobre todo, para evitar que la administración perdiera los derechos sobre las vías, se hizo una carretera, inaugurada en 1992, que se denominó como Avenida de Cotogrande, pero, al año siguiente, para rendir un homenaje a los tranvías cuando se cumplían 25 años de su desaparición, se le cambió por Avenida do Tranvía, su nombre actual.

En el barrio hay varias dotaciones, en su parte central se encuentran dos colegios, el CEIP O Sello, y el colegio Vista Alegre, conocido por la tragedia del río Órbigo.

Más arriba nos encontramos el cementerio de Lavadores, conocido como cementerio de Puxeiros, debido a la expansión que este topónimo, del vecino municipio de Mos, experimentó. Este era el cementerio municipal de Lavadores, y en la actualidad, lo utilizan vecinos de ambas parroquias.

Muy cerca se encuentra el tanatorio Vigomemorial, uno de los dos principales tanatorios de la ciudad, el edificio actual se construyó en 2001 y se encuentra justo en el límite con Bembrive.

En las inmediaciones, nos encontramos el polígono de O Gorxal, un grupo de viviendas baratas construidas en 1965, y que en su día eran un lugar peligroso, debido a que estaban tomadas por gitanos que atemorizaban al barrio y a los conductores de Vitrasa que prestaban servicio a esta zona, de lo que no queda nada.

Alrededor de esta zona hay dos subaldeas que conservan parte de su esencia rural, aunque llenas de casas construidas en la segunda mitad del siglo XX, como son Fontiñas (al sur de Ramón Nieto) y Penís (al norte).