Vigo360

Desde hace algunos años se están popularizando en el transporte interurbano de Galicia los autobuses interurbanos de corta distancia. Esta clase de vehículos tienen algunas diferencias con los autocares tradicionales como son:

• Son de una plataforma más baja, solamente hay que subir tres escalones, que son más pequeños que los de un autocar tradicional.
• Disponen de barras para llevar gente de pie, y la ficha técnica de los vehículos permite el transporte de viajeros de pie.

Y se diferencian de los autobuses urbanos en:

• Tienen más asientos (generalmente el doble)
• Los asientos son más cómodos (en muchos urbanos el asiento es de plástico) y disponen de cinturones de seguridad.
• La capacidad oficial es menor (generalmente entre un 20-30%)
• Disponen de maletero y espacio en el interior para llevar bultos de menor tamaño
• No disponen de plataforma baja y no tienen rampa de arrodillamiento (como los urbanos de los años 90, por cierto).

Por lo tanto, en el caso de Vitrasa, este tipo de vehículos se adaptan bastante bien a algunas de sus líneas, especialmente a las líneas U1 y U2, y a las líneas de la PSA, con un número de paradas más reducido, y con unos viajeros que generalmente se suben o se bajan en el mismo sitio.

También son buenos para las líneas que van a la playa en verano (permiten llevar más carga), para la línea A (para llevar las maletas al aeropuerto, para ir a la universidad o para recorrer distancias más largas). Y para líneas como el 10, 12A, 7, 15, 27, 11…) pueden ser muy buenos, debido a las largas estancias que la gente pasa en el autobús en estas líneas (entre Saiáns y el centro hay 45 minutos, por ejemplo). Y también todas las que en verano vayan a la playa (se pueden llevar el equipamiento necesario para el disfrute de la playa, y… ¿alguien sabe la tortura que puede representar ir de pie en un autobús con más de 70 personas a bordo durante media hora o más?)

Otro tipo de líneas que pueden realizar son las troncales, que la gente utiliza para ir del centro a la periferia, sobre todo las líneas 14 y 18B, donde la gente del rural generalmente va al final de la línea.

Estos autobuses tienen varias ventajas:

• Son mucho más cómodos, permiten llevar entre 50 y 60 personas sentadas, y de una forma mucho más cómoda y segura, debido a que disponen de cinturones de seguridad.
• La capacidad real de los vehículos generalmente es la misma, debido a que un urbano, con 70 personas ya va muy lleno, es obvio que la gente no se distribuye de manera uniforme, se suele quedar en la parte central o delantera, y no se suelen dirigir a la parte trasera.
• Se pueden llevar bultos que en los autobuses urbanos no se pueden llevar, o es más molesto.
• Son más rápidos y con mejor aceleración.

También tienen varias desventajas:

• Son más incómodos para las personas con problemas de movilidad, aunque se les puede reservar la primera fila de asientos, y en ese caso, se les puede permitir salir por la puerta delantera. También para subir un carrito de bebé, que necesita subir los tres escalones.
• Se tarda más en subir una silla de ruedas, y en las paradas en las que sea necesario abrir el maletero, se pierde un minuto o dos.
• El pasillo es más estrecho y con peor movilidad.

Los modelos que se pueden ver por ahí son:

• Iveco Crossway (se puede ver en Abalo, Autos González, Rías Baixas, Cerqueiro, Monbus y Lugove)
• Man Intercity (se ven en Monbus y Lugove)
• Mercedes Intouro (también se ven en Monbus y alguno en Lugove)
• Otokar Territo U (se ven en Abalo, en la línea de Pontevedra a Vilagarcía)
• Setra Multiclass (se ven en Monbus)

Por lo tanto, considero que Vitrasa debería plantearse traer esta clase de vehículos, son más cómodos y más atractivos para los viajeros, aunque se pierde algo de funcionalidad en cuanto a accesibilidad, aunque en ningún caso se deja desatendidos a estos colectivos). De hecho, en el urbano de Pontevedra funciona un Iveco Crossway que ofrece un funcionamiento óptimo. Por lo que en determinadas líneas, las ventajas de este tipo de vehículos se maximizan y se reducen los inconvenientes. Creemos que las ventajas superan a los inconvenientes, y más en una época en la que el transporte público necesita ser más atractivo.